Tu desnudez fruta jugosa, algo en tu cintura me devuelve al mundo; amo esa lengua cuando lame mis orillas; luz de neón, sábanas rojas, hundo los cuchillos en las costuras de tu piel; busco el vientre fértil en semillas; tanto placer chorreando de tu boca, nada me hará daño, nada me toca; hasta entrar la luz, desaparecer.
Hasta entrar la luz otro beso del racimo de tu boca; hasta entrar la luz desaparecer; hasta entrar la luz me rindo a tus pies.
Hasta entrar la luz otro beso del racimo de tu boca; hasta entrar la luz desaparecer; hasta entrar la luz me rindo a tus pies.